Cambiar de sitio el arenero del gato puede parecer fácil, pero cualquier cuidador que haya intentado hacerlo con sus gatos sabrá que intentarlo puede traer muchos problemas y accidentes.
En este artículo de Mascogatos aprenderás un par de trucos para conseguirlo con éxito y además te ayudaremos a escoger el lugar definitivo.
¿Cómo hacer el cambio de lugar del arenero?
Lo más importante para los gatos en el hogar, y lo que les da más tranquilidad, es la estabilidad y la seguridad. Cuando algo cambia en casa, esto les genera cierta sensación de incertidumbre. La incertidumbre provoca que se sientan alerta y estrés, siendo estas razones bastante habituales por la que los gatos muerden sin venir a cuento.
Sea cual sea el método que uses, cuando hagas cualquier cambio de sitio, asegúrate de limpiar bien la zona para que no queden restos ni olores. Recuerda la gran importancia que le da el gato al olfato en su percepción del mundo.
Dicho todo esto, veamos tres maneras de mover la caja de sitio causando el menor estrés posible y consiguiendo una mejor adaptación del animal:
Muévela un poco cada día
Mover la caja de arena unos centímetros cada día es de los métodos más útiles, siempre y cuando tenga lógica en tu caso (por ejemplo, que sea de una punta a la otra de la habitación, o en un recorrido en el cual el gato va a sentirse cómodo haciendo sus necesidades. Nada de poner la caja en medio del pasillo).
Lo deberías de aplicar siempre que sea posible, ya que para un gato es difícil cambiar las rutinas y los lugares donde hace sus necesidades. Por eso, le será más fácil seguir el cambio si la cajita se mueve poco a poco, sin que él la pierda de vista y siga manteniendo el hábito de visitarla.
Adelántate a la situación
Existen gatos más y menos observadores, pero lo cierto es que si ya has movido la caja de sitio es poco probable que tu gato lo sepa al momento.
Para minimizar el tiempo de adaptación y evitar cualquier incidente, te recomendamos que cuando muevas la caja de arena lleves a tu gato a conocer ese nuevo rincón. Es más que probable que rechace tu decisión al principio, y te lo demuestre con alguna defecación donde no nota, pero al menos ya sabrás que él conoce la nueva ubicación.
Algo que puede ayudarle aún más a entender esta situación y redirigir su conducta en un futuro sería llevarlo primero a la zona donde solía estar la caja de arena y acto seguido llevártelo a la nueva zona. Si tienes suerte, después de haber hecho este recorrido contigo, él ya tendrá en mente esta asociación o circuito y será probable que use la caja correctamente.
Feromonas
Cuando parece que un gato no acepta un cambio en el hogar, algo que puede ayudarle a bajar en estrés y aceptar mejor la situación son las feromonas.
Considera introducir un difusor Feliway en el fondo de la habitación para que esta no se le haga tan extraña. Puede ser una solución ideal cuando el cambio es muy exagerado, o en habitaciones (que ahora tienen el cartel de “WC felino”) por las que tu gato no suele transitar.
Ahora sabes qué debes hacer para conseguir que tu gato se adapte mejor, pero, ¿tienes una buena caja de arena y en el mejor lugar posible de la casa?
La respuesta a la primera parte de la pregunta la encontrarás en nuestra tienda de areneros para gatos, donde encontrarás los mejores que conocemos. Para lo demás, sigue leyendo.
¿Cuál es el mejor lugar para colocar la caja de arena?
Tal y como ya explicamos en nuestro artículo sobre las cosas que un gato necesita para ser feliz, el arenero es una parte fundamental del bienestar felino, y es por ello que cobra gran importancia no solo escoger el mejor, sino también el saber dónde colocarlo.
Es posible que hayas decidido cambiar el lugar del arenero de tu gato porque has visto que apenas lo usa o que no es el lugar más ideal de toda la casa. Igual te molesta a ti o le molesta al gato, eso no importa ahora. La cosa es que buscas mejorar vuestra convivencia, y para eso estamos en Mascogatos.
Para evitar que te vuelvas a equivocar, es importante que encuentres la zona definitiva, donde tu gato tendrá siempre la caja de arena. No es algo que vas a querer cambiar nunca más.
Piensa que a los felinos les cuesta mucho adaptarse a los cambios, y prefieren que su casa se mantenga siempre igual (de ahí a que odien tanto las mudanzas). Con las indicaciones que te daremos a continuación, te será mucho más fácil escoger el lugar ideal, sea como sea tu hogar:
Fácil de encontrar
Nosotros tenemos muy buena visibilidad de la casa desde nuestras alturas, pero, ¿y tu gato? Él apenas levanta unos palmos del suelo, y por eso mismo es importante que pueda encontrar fácilmente la caja de arena. ¡No querrás que se olvide de dónde está y empiece a hacer sus necesidades donde le plazca!
Olvídate de poner la caja de arena en lo alto de un estante o un mueble. Tiene que estar al nivel del suelo, y visible desde muchos lugares, nada de ponerla en un rincón oscuro por el que tu gato no pase nunca.
Lejos de la comida y la cama
A nadie le gusta comer oliendo sus propios orines, y menos aún a un animal olfativamente tan sensible como el gato. Procura tener la caja de arena a la otra punta de la casa, bien lejos de comida y bebida. De lo contrario, no la usará para evitar pasar de nuevo por esa situación.
Lo mismo ocurre con la cama, donde quiere relajarse y dormir sin tener que soportar malos olores.
Lugar tranquilo
La caja de arena debe estar en un lugar que el gato vea como tranquilo. Esto tiene varias implicaciones y matices desde su punto de vista:
- Desde donde pueda controlar bien cualquier movimiento en los alrededores.
- Nada de estar cerca de entradas o salidas de la casa, donde puedan asustarlo.
- Este es un momento de vulnerabilidad para él, así que dale intimidad y no lo pongas cerca de ventanas.
- Cualquier lugar donde el gato haya sufrido algún susto, precisamente por esa necesidad de seguridad.
- A veces puede ser útil, una vez el gato ya ha cogido la costumbre, ocultar levemente la caja de arena. Esto es importante en los gatos que están estresados por alguna razón o son muy asustadizos. Si tu gato es de esos, recuerda nuestros consejos sobre cómo calmar a un gato.
Ten varias cajas de arena
Lo ideal es que siempre tengas al menos una caja de arena por gato, más una extra. Si tienes dos gatos, usa siempre tres cajas de arena, y lo más importante es que las separes, de tal forma que tu gato tenga dónde escoger y no se moleste con otros inquilinos, menos aún si se llevan mal.
Sin obstáculos
Hay quien decide poner la caja de arena en lugares donde tienen otros objetos, cosa que es normal en algunos cuartos.
Piensa que un gato puede sentirse agobiado si está rodeado por muchas paredes o muebles, así que intenta que siempre tenga una zona libre alrededor para moverse libremente. Esto también evitará cualquier accidente por la incomodidad de cualquier postura extraña.
Fuera los olores desagradables
Ni se te ocurra colocar la caja de arena cerca del cuarto de la lavadora, o de cualquier otro lugar donde haya productos de limpieza. Para los gatos, esos olores son tan intensos que resultan desagradables, y no tolerarán estar cerca, ni siquiera defecando.
Ten en cuenta también tu comodidad
Hablamos mucho sobre cambiar de sitio el arenero del gato y escoger el ideal o colocarlo en el mejor lugar, pero debes recordar que tu bienestar también importa. Escoge siempre un lugar en el que a ti tampoco te suponga sufrir malos olores o malestar. ¡Al fin y al cabo, esto se trata de que ambos estéis felices!
Bibliografía consultada
- Atkinson, T. (2018). Practical feline behaviour: Understanding cat behaviour and improving welfare. CABI.
- Carlstead, K. Brown, J. y Strawn, W.(1993). Behavioral and physiological correlates of stress in laboratory cats. Applied Animal Behavior Science, 38(2), 143-158. https://doi.org/10.1016/0168-1591(93)90062-T
- Gutiérrez, N. (2022) Mi gato tiene miedo, ¿qué hostias le pasa y qué hago?: Guía completa y amena para quitarle el miedo a tu gato. España: Publicación Independiente.
- S., B. K. W., Casey, R.A. y Brown, S. L. (2013). The behaviour of the domestic cat. CABI
