No son pocos los cuidadores que se preguntan a menudo cómo hacer que mi gato duerma en su cama. Como somos conscientes de ello, hoy hemos preparado para ti un artículo con el que esperamos ayudarte, ¡y que así vuestra convivencia mejore!
¿Por qué no duerme en su cama?
Esta es la primera pregunta que deberías de hacerte. A pesar de tener supuestamente una cómoda camita donde dormir, es posible que prefiera descansar en otro lugar. Los gatos suelen tener buenas razones, y conocerlas puede ayudarte a adaptarte a sus necesidades.
A veces puede dormirse en una estantería, en el sofá o encima de tu cama, por poner algunos ejemplos, pero puede llegar a dormirse en lugares mucho más extraños.
Estas son algunas posibilidades por las que puede estar haciendo esto:
- Hay algo relacionado con la cama que le desagrada, esto lo exploraremos en siguientes puntos.
- Está más cómodo en este otro lugar de descanso.
- Se siente más seguro en las alturas o con tu compañía.
- El gato sufre de alguna dolencia o enfermedad que lo hacen preferir dormir en otro lugar, como el dolor de articulaciones. Si sospechas esto por algún otro síntoma que hayas detectado, lo mejor es visitar al veterinario cuanto antes.
- Ese lugar de la casa le gusta más por alguna otra razón que desconoces, de momento.
¿Cómo es la cama ideal para un gato?
Antes de entrar en materia, creemos que es muy importante que entiendas que la cama debe ser adecuada para él. No solo por cómo es, sino también por dónde está colocada. Como ves, hay muchos factores en juego:
- Temperatura adecuada: En verano, se está fresquito. En invierno, se está calentito.
- Comodidad: Es del tamaño adecuado para que tu gato quepa dentro y pueda dormir en sus posturas favoritas. A algunos gatos les encanta estirarse todo lo que pueden, otros prefieren acurrucarse. Un buen ejemplo de máxima comodidad en invierno son nuestras camas para gatos.
- Zona segura: Es un lugar que forma parte de su zona segura, lo que significa que solo tu gato tiene acceso y ningún otro animal o persona accede normalmente. Esto le aporta tranquilidad.
- Altura: Que una cama goce de cierta altura es algo que les encanta a los gatos, porque poder observar sus alrededores desde un lugar alto les proporciona más sensación de control. Por esto mismo, muchos gatos suelen preferir dormir en sus torres-rascador que al nivel del suelo.
- Higiene: Vigilando con los productos químicos o de limpieza, es importante que limpies la cama de vez en cuando (con jabón neutro). Si tu gato lleva usando la cama desde hace ya algún tiempo y de repente la ha dejado de lado, puede que tenga algo que ver con la suciedad acumulada.
- Sin molestias: El gato duerme entre 12 y 20 horas al día, así que necesita tener un lugar de descanso donde sepa que nadie lo va a molestar. En parte, lo que influye mucho en ganarse esa sensación es que la cama esté situada en un lugar libre de corrientes de aire o de movimiento de personas. Por eso funciona tan bien colocar la cama en una habitación tranquila o en un rincón, donde el gato sabe que nadie podrá pasar por encima de él, pisarlo o hacerle daño sin querer.
¿Qué puedo hacer para que mi gato duerma en su cama?
Hay muchas situaciones posibles que pueden estar ocurriendo en tu hogar, que conllevarían a soluciones distintas. No obstante, en una situación común donde quieres que tu gato duerma en la cama que le has comprado, asegúrate de revisar lo siguiente:
- La cama cumple con las condiciones mínimas de calidad que hemos mencionado en el punto anterior.
- Fíjate en qué lugares suele dormir tu gato y prueba a colocar su cama ahí. Si duerme en tu cama contigo, pon su camita cerca y obsérvalo, sin forzar, para ver qué decisiones toma. A veces es un olor, una textura o un lugar concreto el que le gusta.
- Ten en cuenta qué olores suele haber alrededor de la cama. Evita lo que sea desagradable para él, como el olor a productos de limpieza o los cítricos.
En el caso de que haya más de un gato implicado en esta situación:
- Gatos que duermen juntos: Si tu gato duerme con otro, lo mejor es que no los fuerces a dormir juntos o separados. Los gatitos que viven juntos desde muy pequeños suelen tener un vínculo muy fuerte, y a veces dormir en la misma camita puede ser lo mejor. No obstante, esto es algo que ambos deben de escoger.
- Gatos que no duermen juntos: Si ambos gatos se pelean por un lugar de descanso concreto, debes proporcionarles nuevas alternativas, que podrán aparecer en forma de lugares altos, habitaciones o camitas. Para evitar conflictos, siempre lo mejor es que sobre un recurso de más, es decir: Si tienes dos gatos que no siempre se llevan bien, es mejor tener 3 camas, y que estas estén bien separadas.
Todas estas son acciones más indirectas, que puedes hacer para intentar que al gato acabe gustándole dormir en su cama. No obstante, es posible que, a pesar de cumplir con todos los requisitos e intentarlo TODO, tu gato siga prefiriendo dormir en otro lugar.
Una solución más directa es tratar de positivizar la cama. Esto simplemente consiste en una serie de acciones que te permitirán conseguir que tu gato asocie la cama con cosas positivas o relacionadas con el descanso:
- Usa los premios para atraer a tu gato a la cama. Un premio no tiene por qué ser una golosina, a veces simplemente consiste en felicitarlo por colocarse en su camita y darle muchas caricias.
- Intenta que se relaje estando encima o alrededor de la cama. Cuando tu gato te amase, aprovecha para introducirla. Siendo lo blandita que es, es posible que le encante. Una buena opción es colocar la camita cerca de lugares donde suela amasar, e ir acercándosela para que la escoja como cojín.
- En el caso de que tu gato ya duerma encima de algún objeto, colócalo en la cama para que el animal lo asocie.
¿Cuál es el lugar adecuado para la cama de un gato?
Vistos todos estos consejos, es normal que te preguntes cuál sería un buen lugar para la cama de tu gatito. Por supuesto, ya sabes que él es quien escoge, pero lo cierto es que hay algunos puntos del hogar que suelen ser más atractivos para el descanso gatuno:
- Encima de algún lugar alto desde el que se ven bien todos los puntos ciegos de la habitación, como una torre-rascador o una estantería.
- En lo alto de unas escaleras, desde donde también suelen tener buena visibilidad.
- A los pies de tu cama, o cerca de ti.
- Un lugar tranquilo al que toque el sol directamente, sobre todo por la mañana. Esto puede ser en el patio o al lado de una cristalera.
- El jardín también puede ser un buen lugar, cuando es tranquilo y libre de molestias.
¿Dónde dejar al gato por la noche?
Por último y no menos importante, no hay que olvidar que a los gatos les encantan las rutinas.
Hay una rutina que podrías establecer a partir de ahora para que tu gato empiece a asociar su camita con la hora de dormir.
Una acción que podría marcar la diferencia, sería colocarlo en su cama cuando todos en casa se van a dormir. Si bien es cierto que los gatos pueden volverse muy juguetones y activos por la noche, serán capaces de adaptarse poco a poco.
Es posible que los primeros días el gato reaccione marchándose enseguida de la cama, pero puede que vaya entendiendo la relación entre la cama y el descanso, y acabe decidiendo probar a dormir para adaptarse. Como te decíamos, si la cama cumple con los gustos de tu mascota, no habrá manera de separarlo de ella una vez la pruebe, y dormirá mejor que nunca.
Ahora que ya sabes cómo hacer que tu gato duerma en su cama, recuerda que en Mascogatos seguiremos trayéndote los mejores productos para darle la calidad de vida que se merece, también durante el descanso.
Bibliografía consultada
- Amat Grau, M., Camps, T., & Le Brech, S. (2017). Manual práctico de etología clínica en el gato. Sant Cugat del Vallés: Multimédica Ediciones Veterinarias.
- Atkinson, T. (2018). Practical feline behaviour: Understanding cat behaviour and improving welfare. CABI.